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En la URSS, cuando la escasez de bienes era en realidad la norma de la vida del pueblo soviético, la gente tenía que girar de alguna manera. Y el proverbio, "una artimaña para inventar la astucia", era la realidad absoluta de la época.
Foto: pixabay
Muchas personas saben por las historias de sus padres, abuelos, bisabuelos qué trucos e inventos tuvieron que hacer para lidiar con el déficit de alguna manera: rehicieron, alteraron, encontraron una aplicación nueva y, a veces, incluso completamente inusual para cosas y objetos específicos. Ahora, por supuesto, esto es de poco interés para cualquiera, excepto como un hecho histórico, pero luego, en condiciones de déficit casi total, esta era la única salida.
Pero aún es interesante aprender sobre las alteraciones a las que recurrían las personas en la época soviética, no por el simple hecho de implementar y realizar alguna idea creativa inusual, sino exclusivamente para fines personalizados.
Nueva vida de cosas viejas
En la época soviética, las cosas fueron tratadas con mucho cuidado, incluso si habían cumplido su mandato hace mucho tiempo, rara vez tiraban algo. Más a menudo que no, las cosas viejas encontraron una nueva aplicación. Una alteración muy popular de esa época es un cambio de abrigo o alguna otra cosa. Está claro que la ropa exterior, si no la cuida y no la cuida, se desgasta con el tiempo. Pero tales productos, por regla general, siempre se cosieron en un forro, debido a que el lado equivocado retuvo su apariencia mucho más tiempo que el frontal. Por lo tanto, muchos voltearon el abrigo y lo cambiaron, cambiando el lado con costura y el lado frontal. Como resultado de este truco, la cosa sirvió por varias temporadas más. O, usando el mismo método, cosieron algo completamente nuevo (sarafans y faldas) del abrigo viejo, usando el lado incorrecto de la tela como el frente.¿Qué se puede hacer con un abrigo viejo?
Por supuesto, se alteraron otras cosas, y no solo para los niños. Las telas eran de buena calidad, y lo nuevo no parecía una nueva versión.
Foto: carmine.canalblog.com; mywesternheart.com
Los jeans para el hombre soviético eran la prenda de vestir más codiciada e inaccesible. Los propietarios de este tesoro pertenecían a los jeans con gran temor. Literalmente llevaron a los agujeros. Pero incluso aquí no tenían prisa por separarse de ellos. La alteración más impactante de los jeans viejos: ¡había una falda! La parte superior de los jeans se cortó por encima de la costura del escalón y se cosió un volante o se extendió una falda hecha de otra tela.
Cómo coser una bolsa de playa grande de jeans viejos: una clase magistral
La foto es un cuello de tortuga Biflex
Traje de baño de cuello alto de la foto anterior
Las cosas de la tienda Birch se valoraron no menos que los jeans. Por lo tanto, tuvieron una segunda vida. ¡Los súper cuellos de tortuga Biflex se cambiaron posteriormente a trajes de baño geniales! Dado que era casi imposible comprar productos confeccionados, y la calidad de los que se vendieron dejó mucho que desear.
Además, se modificaron cosas nuevas.
Por ejemplo, se compraron camisas de gran popelín para hombres en tallas grandes y hermosos vestidos de verano o faldas Tatyana con un top o una camiseta cosida de dos camisas.
Valió la pena a bajo precio, y los atuendos eran elegantes.
Vestirse de la chaqueta de un hombre con sus propias manos: una clase magistral
Patchwork soviético: una costurera tomó 2-3 suéteres atascados, los cortó audazmente en trozos de diferentes tamaños y luego les cosió cosas muy hermosas. Esto más tarde la llevó al teatro, donde trabajó como cómoda.
Y una más, quizás, la alteración más divertida e inusual.La calidad de la tela de la que se cosió la ropa interior fue muy GOST en esos años. Entonces, una mujer compró braguitas cálidas de prendas gruesas grises y beige, las rasgó por completo y luego cortó nuevos detalles y cosió algo como sudaderas modernas.
Tejido de punto
Los productos Jacquard, las alfombras y las mantas ligeras aflojaron y tejieron hermosas chaquetas de punto con estos hilos.
En la foto, un jersey del suéter de papá
Las prendas de punto a menudo se soltaban y se ataban con nuevos productos, especialmente de artículos para adultos, niños y adolescentes. Y para ocultar que un suéter nuevo ya había sido tal, hilado repintado.
Manteles de ganchillo de dratva (hilos de lino grueso para arreglar zapatos) que aún viven y deleitan a sus azafatas.
Asiento de hilo tejido de bricolaje para taburete
Las mujeres y las bolsas de compras estaban tejidas con una cuerda de algodón (cordel).
Una modista de chatarra rizada (y este era el material más genial en esos días) tejía maravillosas zapatillas de color hechas en casa.
Suéteres de punto innecesarios, jerseys y otras cosas se cortaron en tiras, se ataron entre sí, se enrollaron en bolas y se tejieron con alfombras redondas y asientos en taburetes.
Alfombra hágalo usted mismo
Ropa de cama
Los overoles de camuflaje para la caza invernal fueron cosidos de viejas sábanas blancas. Gran camuflaje resultó.
De las dos viejas fundas nórdicas, una estaba cosida nueva.
No solo coser
Las medias elásticas negras eran un producto tan escaso que era más fácil colorear el cuerpo. Para hacer esto, compraron tinte negro y en la sartén vieja cocinaron medias "nuevas" con gas.
Las zapatillas de tela simples de las tiendas cooperativas estaban decoradas con bordados a mano.
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Anchos lazos de nylon decorados vestidos en lugar de encaje. Y a partir de arcos plisados, generalmente largos y anchos, cosían minifaldas escalonadas y esponjosas.
Una forma muy creativa de actualizar algo y hacerlo inteligente es bordar un suéter o un jersey con la lluvia de Año Nuevo. Resultó una especie de lurex.
Los impermeables con capucha se cosieron de una banda de polímero enrollada.
Piso. Foto: wikipedia.org
Algunos artesanos hicieron una cortadora de césped con una pulidora. Una pulidora de pisos es una máquina para limpiar, pulir o frotar varios revestimientos de pisos que no son alfombras. En la URSS, el término "pulidor" se aplicó a varias máquinas manuales, mecánicas y eléctricas para limpiar pisos.
Las plantillas gastadas estaban talladas en las botas de las viejas botas de gamuza y un abrigo de piel cygeik.
Con los materiales de construcción en los años 70 fue difícil, por lo que para la tapicería de casas de campo y cobertizos en 6 acres, se usaron tablas de cajas de madera (contenedores) y paletas.
Por supuesto, si no entregaran botellas de vidrio vacías, harían bordes para macizos de flores, cavarían botellas con el cuello en el suelo.
Muchos han oído hablar de la famosa caldera doble soviética. Además, este objeto era plegable y era muy fácil de usar: se colocó un colador en una sartén profunda con agua, por ejemplo, chuletas y toda esta estructura se cubrió con una tapa.
En las viejas medias de kapron se almacenaban cebollas.
De envoltorios de caramelos de chicles y chicles, se hicieron cortinas de origami para aberturas sin puertas. Para hacer esto, los envoltorios de dulces de los dulces se convirtieron en tubos y luego se tejieron en rayas rizadas entre sí.
Foto: skiptomylou.org
Las chozas de Panamá se hicieron de periódicos y se usaron durante reparaciones al pintar techos, por ejemplo.
Lo que se puede hacer desde viejos lazos: una clase magistral
En ausencia de Internet, el correo resolvió el problema de la comunicación remota. La gente intercambiaba cartas y paquetes, que generalmente iban acompañados de hermosas tarjetas de felicitación.Se almacenaron cuidadosamente, y cuando se acumularon demasiadas postales, se hicieron cajas de regalo, paquetes y ataúdes.
Todo tipo de joyería se hizo con el alambre de color, que se sacó de los cables de construcción: anillos y pulseras hechas con la técnica de macramé. De las hermosas cuentas innecesarias, se hicieron pequeñas pupas.
Y finalmente, otra receta soviética simple para la belleza. Los restos de lápices labiales de diferentes colores se retiraron cuidadosamente de los tubos, se colocaron en un recipiente pequeño y se calentaron para fundir ligeramente la masa. Luego, todo se mezcló completamente y se obtuvo lápiz labial con un nuevo color a partir de los residuos.
Material preparado por Julia Dekanova.
Foto del archivo personal del autor.
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